sábado, 30 de abril de 2016

Al estilo de Salinas

Hasta entonces
nunca fui tan ingenua
ni descendí tan profundo...
hasta las arenas húmedas de tus mares de calma.
Nunca bajé hasta las tinieblas
de tu estacada,
nunca vi un traje más
limpio y puro,
jamás subí más allá
del desdén de tus miradas.
Pero cuando tú apareciste,
sí tú, entre todos,
más clara que tus hojas
vírgenes estuve, más
completa que las que tienes
acabadas.
Pero tú bajaste del Olimpo,
y con seguridad de tirano
me señalaste el alma,
ya no hay nada que me recuerde
quién era y qué quería. Apareciste,
y ya no puedo regresar a los brazos que no recuerdo
porque apareciste, y tú aparición lo ha enterrado todo.
Ya muerto, ya huído el tiempo y la voz, listo para nacer
todo a la vez, 
me entregas la vida de cero,
pura, recién nacida, ya sin memoria,
sin dientes de rabia
ya no hay nada que romper
porque estás aquí temblando
enseñándome a escribir de nuevo, leyendo conmigo dos primeros versos,
oliendo la primera flor, perdiéndome en un jardín por vez primera.
Dándote todo el ser que queda en esta piel nueva ya, sin cementerio,
vacía de historias , borrada de pasado
para embarcarnos en el viaje que me entregas a través de este instante que pasa a tantavelocidad qnome datiempo deanotar.

miércoles, 27 de abril de 2016

el malo acaba solo

Que no te coja la vida solo,
que no te coja ese gusano del camino
vagando con tu cielo negro, por favor...
que no te vea nadie dentro del coche
donde desgarré todo un pecho de tambor de llanto,
que no te encuentre con los años
vistiendo unos ojos que no conozco,
de los que nunca bebí ese jarabe denso...
que no te vea pintado en mi cuadro
dulcemente cristalizado en tu tristeza
y hondamente solo como el viajero
que solo sabe que se ha ido cuando presencia una casa
en la que no habita,
como el enamorado que se siente latir al encontrarse un corazón yaciendo
podrido en la entraña de la noche...
que no te quedes solo si mi soledad puede evitarlo.
y saber que no encontrarte solo es mi dirección porque no hay entrañas en la noche,
porque no hay cuadros que vean los ojos que visto,
porque yo no pinto nada.

miércoles, 20 de abril de 2016

La titiritaña del No

La tarde se vacía en los brazos del enigma.
La duda bucea por tus océanos, se dibuja de olas destruyendo a su trazo cada grano de arena, ya no queda fondo, ya no hay suelo hacia el que hundirse.
De la destrucción se van abriendo los peces con su aroma de estrellas...
y ya no queda margen, borde, firmamento, vuelta...
Dentro de tus carnes las arañas se lamentan....
Siempre
La  misma hora.... siempre la misma aurora... siempre la misma duda... siempre el mismo "NO" para siempre...
Bajo tu ropa... se cuelgan las arañas,
                                  bajo las arañas... tu ropa las araña.

martes, 19 de abril de 2016

Siglo XX y alcohol

Me elevas, me elevas hasta el sueño sin cumbre. Me elevas, corazón, con tus zapatos de charol, con tus trajes del siglo de oro, es decir, del siglo XX. Te me llevas de la mano mientras con la otra agarras tu copa carmesí y bailamos hasta despertarnos juntos sobre una montaña de libros desenfundados. Me atrapas con tu pluma y me sueltas suelta entre tus versos sudados, empapando todo de alcohol y metáforas que huelen a descapotable con alas, y sentado en tu trono motorizado me elevas, me elevas hasta el sueño y corazón, corazón del siglo XX, elevas tu copa y me elevas hasta el sueño.
Mírame mañana y leemos a Salinas mientras susurras con tus labios mentirosos, elévame hasta lo alto de tu sonrisa de farola apagada, de farlopa fundida. Corazón, mírame así, como miras a cada oyente cuando recitas, cuando me invitas y juntos escuchamos este jazz... Déjame tu mano un rato más mientras me hablas de filosofía y te ríes de lo ridículo que resulta este mundo, la universidad, los intelectuales, todo lo que se respeta.
Sigue viviendo y riendo, no pares, mi amor, más fuerte porque ya toco el sueño y lo elevo hasta ti.

martes, 5 de abril de 2016

el mosquito y nuestro veneno

A veces me pregunto si solo nosotros nos cuestionamos nuestra existencia.
Un mosquito, ¿se pregunta para qué vive? ¿cómo será su futuro? ¿por qué no tiene suerte? ¿para qué pica? Yo me lo pregunto. A veces quisiera huir pero no encuentro mi espacio. El mosquito puede volar pero ¿hasta cuándo? no lo sé.
El mundo parece inmenso pero la vida es tan pequeña que a veces cabe tan solo en una isla, en una casa, en un vaso.
¿Se preguntarán los mosquitos si nosotros nos preguntamos para qué vivimos? ¿Por qué no volamos? ¿Para qué tanto veneno?
De pronto, se me ocurre algo; una idea, un escrito, una pintura... me sorprendo de alegría y luego me inunda la profunda tristeza de saber que jamás se me ocurrirá nada así. No puedo crear algo que ya ha nacido.
Y todo se va volando.

lunes, 4 de abril de 2016

mi soledad bucea en un mundo que no cabe en este mar de nada

Un hombre pasea por el patio,
choca con una hormiga que llora,
se le ha roto una ilusión; agua, nubes, desolación.
Las olas ahogan unas uñas mal pintadas,
cómo se escapan las oportunidades...
La hormiga no para de llorar, el agua se ha llevado sus sueños
a nado, bajo una balsa, aguantando todo el peso,
escociendo la herida del náufrago,
lloviendo en la cara del hombre que pasea.

Un hombre llora en el patio que pasea,
Un patio llueve en el paseo que hormiguea...

Ha cogido a la hormiga y tras las rejas del patio de la cárcel la ha dejado libre caminar.
Ha dejado de llover, ha dejado de escocer,
ha dejado de llorar, ha dejado su cuerpo en las olas del tiempo preso,
ha dejado su alma en una hormiga que pasea tan despacio que se inunda el patio con tanta libertad.